La última muerte en Villabona supone el primer fracaso del protocolo antisuicidios

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"La situación de la cárcel está descontrolada", denuncia Trevín (PSOE), mientras IU exige que se aclare "de inmediato" lo ocurrido

L. Á. V. La última muerte registrada en la enfermería de la prisión de Villabona supone el primer fracaso del protocolo de prevención de suicidios en el centro penitenciario. La investigación aclarará las circunstancias en las que el gijonés C. M. B. F. logró, en la madrugada de anteayer, sábado, quitarse la vida por ahorcamiento en la celda que ocupaba con otros tres presos, uno de ellos el asignado para acompañarlo las 24 horas del día.

El pasado 22 de abril, el hombre -de 64 años y detenido un mes antes por haber prendido fuego a un piso de su propiedad en el que dormían tres inquilinos- ya había intentado quitarse la vida, motivo por el que fue trasladado a la enfermería y sometido al protocolo antisuicidios.

Éste consiste en la asignación de un preso de un perfil determinado para que esté de forma constante con el recluso que tiene tendencias suicidas. Además, se establece una vigilancia especial por los funcionarios. El cuerpo de C. M. B. F. fue descubierto a las siete de la mañana de anteayer, sábado, durante una de las rondas de control prescritas.

El preso sólo recibía visitas de su abogada y, tras autolesionarse, estaba a tratamiento y se le hacía un seguimiento por parte de un psicólogo y un psiquiatra. Es la cuarta muerte que se registra en Villabona en seis meses. El pasado noviembre murieron por sobredosis dos presos canarios, y el pasado abril murió otro preso, éste langreano, también por una combinación de drogas.

El sindicato de funcionarios de prisiones ACAIP lamentó el fallecimiento, aunque indicó que el recluso estaba vigilado y que un hecho así entra dentro de lo posible. Otro funcionario indicó, no obstante, que no se están aplicando adecuadamente los protocolos. El diputado socialista Antonio Trevín opinó que "está claro que la situación en la prisión está descontrolada", y culpó a la situación creada por el desmantelamiento del modelo de las unidades de tratamiento (UTE). "Se ha duplicado el número de incidentes. Es una situación que se puede consentir y hay que exigir medidas. Hay que cambiar la dirección del centro e Instituciones Penitenciarias debe asumir responsabilidades", indicó.

Gaspar Llamazares (IU) también se mostró indignado. "Creo que las autoridades del Principado y sus responsables públicos debemos exigir una investigación que aclare los hechos y establezca responsabilidades. Ya está bien, esta situación en inadmisible. Vuelve a ser evidente que el penal de Villabona necesita un cambio, vuelve a hacerse presente la convicción que tenemos de que la cárcel es un caos", indicó.

 

     Noticia de La Nueva España de dia 18/05/2015